De acuerdo con la última encuesta realizada por Massive Caller, la inseguridad se posiciona como la principal preocupación de los mexicanos, seguida de la corrupción, que ocupa el segundo lugar. Esta tendencia refleja una creciente inquietud entre la población, que enfrenta diariamente retos significativos en su entorno.
En el análisis de las problemáticas nacionales, el mal gobierno se ubica en tercer lugar, mientras que la pobreza cierra el cuarto puesto. Curiosamente, la mala infraestructura pública es considerada la problemática menos grave por los encuestados, lo que sugiere una posible despriorización de este tema en comparación con otras preocupaciones más urgentes.
Un dato alarmante revelado por la encuesta es que el 77% de los mexicanos afirma que su salario mensual no es suficiente para cubrir sus necesidades básicas. Este aspecto económico se entrelaza con las preocupaciones sobre la inseguridad y la corrupción, creando un ambiente de desconfianza y descontento social.
En el ámbito político, un 70% de los encuestados se siente más cercano al partido Morena, lo que indica un fuerte apoyo hacia la actual administración. En contraste, apenas el 1.6% y el 1.1% se identifican con los partidos satélite asociados, lo que resalta la falta de conexión de estos últimos con la ciudadanía.
La confianza en el gobierno de la presidenta Claudia Sheinbaum se mantiene en un 64%, con muchos ciudadanos esperando que su administración priorice la seguridad pública. Este deseo es un reflejo de la urgencia que sienten los mexicanos por un entorno más seguro y estable.
A medida que el país enfrenta estos desafíos, queda claro que la corrupción y la inseguridad son temas que requieren atención inmediata y soluciones efectivas. La gestión del gobierno y la percepción de los ciudadanos jugarán un papel crucial en el futuro de la política y la calidad de vida en México.