
En una decisión calificada como histórica, el Cabildo de Tijuana aprobó por mayoría la creación de cinco nuevas secretarías municipales, marcando un hito en la reestructuración del XXV Ayuntamiento. El objetivo es modernizar la administración pública y mejorar los servicios ofrecidos a la ciudadanía, sin incrementar sueldos ni nóminas, de acuerdo con lo informado por el gobierno municipal.
Las nuevas secretarías: Finanzas, Cultura, Mujer, Protección al Ambiente y Humanismo se integrarán al esquema de gobierno para fortalecer la operatividad de las dependencias existentes. Según la administración encabezada por el presidente municipal Ismael Burgueño, esta reingeniería administrativa responde a un modelo de gestión con enfoque humanista, priorizando la atención eficiente y equitativa para los habitantes de Tijuana.
La reforma al Reglamento de la Administración Pública Municipal también incluyó la creación de un nuevo cuerpo de inspectores, cuyo propósito será centralizar las labores de inspección y vigilancia para garantizar el cumplimiento de los reglamentos municipales. Este organismo tendrá competencias en áreas como protección ambiental, infraestructura urbana y actividades comerciales, con el fin de mejorar la eficacia del gobierno local.
Entre las iniciativas más destacadas, la creación de la Secretaría de la Mujer representa un avance significativo en la equidad de género. Este nuevo organismo busca garantizar la igualdad sustantiva y reconocer la participación de las mujeres en la toma de decisiones. Además, Tijuana se posiciona como el primer municipio en integrar programas de la presidenta Claudia Sheinbaum, fortaleciendo políticas públicas enfocadas en la igualdad de derechos para las mujeres.
Durante la sesión extraordinaria del Cabildo, también se aprobaron otras iniciativas relevantes. Entre ellas, destaca la actualización del Reglamento de Panteones, que no había sido modificado desde 1962, con el objetivo de mejorar la regulación y operación de estos servicios.
Asimismo, se autorizó la donación de terrenos municipales al Gobierno de Baja California para la construcción de la Vía Elevada, un proyecto diseñado para aliviar el congestionamiento vial en la ciudad. Finalmente, se reformó el Reglamento de Tránsito y Control Vehicular, eliminando el requisito de licencia tipo «C» para los conductores de vehículos tipo Pick Up, facilitando su circulación con licencia de automovilista.